martes, 22 de mayo de 2012

Tus preguntas


Hoy no te voy a contar nada. Podría compartir contigo alguna historia, como he hecho otras veces, e imaginar si te ha gustado, qué emociones has sentido al leerla, pensar si te servirá de ayuda...
Pero hoy he decidido callarme y escucharte. ¿En qué te puedo ayudar?
A menudo durante una consulta o al terminar una charla, incluso de manera espontánea al comentar que soy psicóloga me suelen hacer preguntas acerca de diversos temas, en general, o para casos más concretos. Hay personas que por timidez o muchos otros motivos no dan el paso, así que te invito a aprovechar esta oportunidad para que preguntes, comentes, expongas...deja tu pregunta en el apartado "comentarios". Puedes hacerlo de forma anónima, si lo prefieres.
¡Prometo contestar!


domingo, 6 de mayo de 2012

Cambio de rumbo

A veces nos empeñamos en que son los demás, la sociedad, el mundo,
el universo, los que tienen que cambiar…

Dos acorazados asignados a la escuadra de entrenamiento habían estado de
maniobras en el mar con tempestad durante varios días. Yo servía en el buque
insignia y estaba de guardia en el puente cuando caía la noche. La visibilidad
era pobre; había niebla, de modo que el capitán permanecía sobre el puente
supervisando todas las actividades.
Poco después de que oscureciera, el vigía que estaba en el extremo del puente informó:
“Luz a estribor”.
“¿Rumbo directo o se desvía hacia popa?” gritó el capitán.
El vigía respondió “Directo, capitán”, lo que significaba que nuestro propio
curso nos estaba conduciendo a una colisión con aquel buque. El capitán llamó al
encargado de emitir señales.
“Envía este mensaje: Estamos a punto de chocar; aconsejamos cambiar 20 grados su rumbo.”
Llegó otra señal de respuesta. “Aconsejamos que ustedes cambien 20 grados su rumbo”.
El capitán dijo: “Contéstele: Soy capitán; cambie su rumbo 20 grados”
“Soy marinero de segunda clase-- nos respondieron--.Mejor cambie su rumbo 20 grados.”
El capitán ya estaba hecho una furia. Espetó:
“Conteste: Soy un acorazado. Cambie su rumbo 20 grados”.
La linterna del interlocutor envió su último mensaje: “Yo soy un faro”.

Cambiamos nuestro rumbo.

Autor: Stephen R. Covey. Los siete hábitos de la gente altamente efectiva.